La NFL hace un ejercicio de "Gatopardismo" con su "Primavera árabe"
No me creo nada del último ejercicio de funanbulismo de la NFL que solo está haciendo el "Gatopardismo" y que acabará como la Primavera Arabe, es decir, en nada.
Hará casi una década en los países árabes saltaron una serie de revueltas y manifestaciones sociales reclamando la democracia y derechos sociales. Países como Túnez, Libia o Egipto vivieron auténticas revueltas sociales en la calle en las que sus gobiernos fueron derrocados, sobran los comentarios sobre lo sucedido con Muamar El Gadafi, asesinado por sus compatriotas. En Egipto Hosni Mubarak también cayó y en otros países como Túnez el Gobierno acabó cayendo y en Argelia sus eternos dirigentes prometieron reformas, reformas que por supuesto nunca llegaron.
Desde Occidente se pensó que la mal llamada Primavera Arabe era la entrada definitiva en los países árabes de las democracias y de los derechos sociales. Era el papel preponderante de la figura de un estado laico cuyo papel es dar servicios, educación, seguridad, justicia y todas esas funciones de los estados modernos. Dejando de lado cuestiones geoestratégicas y de política mundial ¿Ha cambiado algo en aquellos países donde tuvo lugar la Primavera Arabe? Pues mirad, no, no y no. Siguen siendo la misma mierda de países que ya eran antes de la Primavera Arabe, incluso en muchos de ellos la situación ha empeorado, que se lo digan a Egipto, que ha tardado lustros en recuperar el turismo, o a Túnez, que era uno de los grandes destinos del turismo europeo. Sobre Siria y otros países mejor nivel hablar, la Primavera Arabe solo trajo algo mucho peor.
La Primavera parece esa época del año destinada a las grandes revoluciones. Era primavera en Mayo del 68, muchos de aquellos revolucionarios ahora pisan moquetas y se sientan en los mullidos sillones de los consejos de administración de empresas muy importantes. En España el movimiento popular que dio lugar a la formación política de Podemos nació al albur del movimiento del 15 de mayo. Pero lo dicho, no voy a hablar de política aquí, tan solo quiero sacar a la luz que parece asociarse la estación de la Primavera con el nacimiento de una nueva esperanza o vida, el soneto Primavera de Antonio Vivaldi es un himno al despertar de la vida.
La NFL parece vivir su propia “Primavera” en estos días aún oscuros como consecuencia del Covid 19. La muerte de George Floyd (que sea un juez quien determine su calificación) ha generado una oleada de protestas y manifestaciones sociales de las que la NFL no ha podido escapar. Hasta ahora la NFL había estando esquivando la bala de Colin Kaepernick, el hombre que puso contra las cuerdas a la toda poderosa liga y con el que alcanzó un acuerdo confidencial para zanjar la contienda. No se tardo ni un solo día en recordar la memoria de Colin Kaepernick tras el incidente de George Floyd, algo que ya estaba casi olvidado en la selectiva memoria colectiva de la NFL. Tres años fuera de la liga es suficiennte para que nadie se acuerda de ti, ni tan siquiera cuando algún QB muy incompetente encontraba trabajo.
Pero esta vez el incendio no lo provocaba Colin Kaepernick sino uno de esos “hombre buenos” de la NFL,uno de esos jugadores con una imagen impoluta y blanca, Drew Breesm el hombre que sacó del olvido a los New Orleans Saints, una de las franquicias perdedoras por excelencia, y todo ellos tras haber sido la ciudad devastada por el Hurcan Katrina. Drew Brees se descolgaba con unas declaraciones que hacían saltar a la comunidad afro americana de la NFL, entre ellos sus propios compañeros de equipo como Michael Thomas, Alvin Kamara o Malcolm Jenkins, que todos manifestaron su malestar con el QB.
Las reacciones no se hicieron esperar y tras una noche de pesadilla para el QB este emitió un comunicado al día siguiente donde sinceramente yo no veo un solo atisbo de disculpa, sino de un miserable intento de salvar los muebles, lo que vulgarmente llamamos en España, “recoger cable”. Drew Brees trataba de minimizar los daños, para alguien como él ver su imagen manchada es muy superior a cualquier otra cosa, de allí nacen sus disculpas que no son más que lágrimas de cocodrilo.
La cuestión se ha ido mucho más allá, las manifestaciones de protesta fueron a más y las manifestaciones públicas de los jugadores también. Todos aquellos que dejaron que Colin Kaepernick se incinera y se auto inmolara salieron de forma más que oportunista a la palestra. Sí, es que probable que muchos no eran parte de la NFL cuando lo que pasó con Colin Kaepernick empezó, pero ninguna había mostrado muchos apoyos al ya ex QB, pero todos ahora dicen comprenderlo. Y llegó la guinda del pastel llegó el viernes cuando Roger Goodell, el Comisionado se descolgaba con un vídeo donde venía a reconocer los errores de la liga y prometer rectificación. Eso sí, ni una sola palabra hacia Colin Kaepernick ni tan siquiera una disculpa. Luego hemos sabido que Roger Goodell grabó es vídeo con el visto bueno del clan de los dueños más poderosos, pero que otros muchos ni sabían de aquello.
Mirad, a mi todo esto me parece una comedia, un postureo más que interesado, un intento de capear el temporal arrimándose al paraguas de moda. No me creo nada, no me creo a unos dueños que han financiado con dinero de su propio bolsillo a Donald Trump, que llegó a calificar a Colin Kaepernick de ser más o menos un hijo de Satanás. Esos dueños, que son los que se arrodillaron ante Donald Trump y no por Colin Kaepernick, son los que ahora quienes pretender darnos una imagen de solidaridad donando dinero a organización contra el racismo. Al final todo esto no es más que un ejercicio de “Gatopardismo”, que se resume en una sola frase, “Si queremos que todo siga igual como está, es necesario que todo cambie”. Ahora llegará el verano: playas, bicicletas, calor, vacaciones y pasará. Llegará septiembre, donde lo que realmente nos preocupará la temida segunda oleada del Coronavirus y el regreso de la NFL.
Y ya veréis cuando llegue el otoño y las hojas de los árboles empiecen a caer de nuevo ¿Veremos a los jugadores hincar la rodilla en señal de lo que sea? ¿Veremos a señores como Jerry Jones o Robert Kraft, amigos o colaboradores de Trump, dejar que sus jugadores se arrodillen mientras suene el himno? ¿Veremos a gente como Bill Belichick o Tom Brady, también amigos de Trump hincar la rodilla?¿Veremos a Drew Brees, Aaron Rodger u otros QB blancos hincar la rodilla en el suelo? Mirad, a mi me extrañaría ver incluso a QB afroamericanos hacerlo, sí, habrá algunos que lo harán, pero ojalá me equivoque mucho, pero veremos a algunos hacerlo y la inmensa mayoría mirar a otro lado porque nadie muerde la mano de la que come.
La Primavera Arabe se saldó con un sonado fracasó, nada ha cambiado sino empeorado en los países árabes. Nada ha cambiado en la política española, incluso ha empeorado con una polarización y crispación no vista desde hace décadas. Y nada va a cambiar en la NFL, eso sí, ojalá me equivoque.